Cuando la muerte
entregue a mí su vida
y las sombras,
aniden en mí su silencio.
Romperé la cruz
de mi tormento.
Mientras mi cuerpo
envolverán en blanco lienzo.
En la tumba cubrirán
con tierra mi sepulcro.
Y ya no me verás
querida mía.
Más allí estaré
solitario… yerto,
esperando redención
en el umbral del tiempo.